¿Todos los suplementos deportivos son detectables mediante pruebas de dopaje?

Desde el origen del deporte, los atletas siempre han buscado formas y medios para mejorar su rendimiento.. En esta búsqueda de rendimiento, los atletas usan complementos alimenticios e incluso productos médicos. Esta práctica no es reciente, data de los inicios del atletismo. Los antiguos griegos y romanos usaban hierbas, hongos, semillas de amapola y estimulantes como el strychnos para fortalecerse. Este término luego evolucionó y se usó mucho en el mundo de los caballos de carrera.

Hoy en día, los complementos alimenticios y las sustancias que mejoran el rendimiento como las hormonas sintéticas se han vuelto imprescindibles en el mundo del deporte. La sed de victoria de algunos deportistas les empuja a utilizar sustancias muy potentes capaces de otorgarles una fuerza sobrehumana, a veces incluso a costa de graves efectos nocivos para su salud. En este sentido, las distintas federaciones deportivas de todo el mundo han acordado poner en marcha una lista de sustancias y métodos prohibidos que se actualiza todos los años. El AMA (la Agencia Mundial Antidopaje) es responsable de desarrollar y actualizar esta lista.

Hoy en día, el dopaje se define como el uso de métodos o sustancias prohibidas que aparecen en la lista establecida por la Agencia Mundial Antidopaje. ¿Qué medidas toman las federaciones deportivas para garantizar que los atletas no puedan utilizar los métodos y sustancias enumerados por la Agencia Mundial Antidopaje ?

¿Cómo llegamos a la prueba de dopaje?

La primera prohibición de los productos que mejoran el rendimiento en el deporte se remonta a 1928 por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF). En ese momento, no había forma de verificar el estado de los atletas. Las muertes de los ciclistas Knud Jensen y Tommy Simpson durante los Juegos Olímpicos de 1960 y el Tour de France de 1967 impulsaron el establecimiento de una comisión médica llamada Comisión Olímpica Internacional (COI), que publicó la primera Lista de prohibiciones del COI en 1967. Esta lista inmediatamente pasó a ser la de las prohibiciones de las federaciones deportivas olímpicas. Fue a raíz del asunto Festina de 1998 que el COI convocó la primera conferencia mundial sobre el dopaje en 1999. Esta conferencia dio origen a la Agencia Mundial Antidopaje, que continúa luchando contra el uso de productos dopantes hasta ahora.

En los cuatro rincones del mundo, existen agencias antidopaje que, con mayor frecuencia, examinan a los atletas durante las competiciones. Pero los atletas también pueden ser evaluados durante el entrenamiento o incluso en su propia casa. El control se realiza de acuerdo con las reglas del Código Mundial Antidopaje. y según estándares internacionales. La prueba más común es la examen de orina ; también es posible que en algunos casos la prueba sea de sangre.

Los objetivos básicos de las pruebas de dopaje son:

• apoyar y preservar la ética deportiva
• salvar la salud física y psicológica de los jugadores
• asegurarse de que todos los competidores tengan una oportunidad igual.

La nueva definición de dopaje significa que los fabricantes de sustancias y complementos alimenticios están constantemente innovando al sacar al mercado nuevos productos que permiten tener resultados tan espectaculares como los de las sustancias prohibidas. A veces, estas nuevas sustancias son incluso más efectivas que cualquier cosa en el mercado en el pasado.

La prueba de dopaje es una tarea ingrata cuando la nueva estrategia se convierte en el defecto del mañana:

Los resultados de un estudio realizado por un equipo de nueve investigadores de las universidades de Tuebingen (Alemania) y Harvard (Estados Unidos) sobre el dopaje en deportistas siembra dudas sobre la eficacia de las pruebas de dopaje. De hecho, este estudio se llevó a cabo en 2011 durante los Juegos Panárabes de Doha y mundos de Daegu, donde los investigadores entrevistaron de forma aleatoria y anónima a 2.167 atletas en total.

Al final de las encuestas, el 45% de los atletas que participaron en los Juegos panárabes y el 30 % de los que participaron en los Campeonatos del mundo afirmaron haber usado al menos una vez sustancias y métodos prohibidos por  la Agencia Mundial Antidopaje mientras que solo el 3.6%  de los atletas de los Juegos Panárabes y el 0.5 % de los de los Campeonatos del Mundo dieron positivo.

Estos resultados son absolutamente desconcertantes, pero no es sorprendente, ya que la lista de sustancias prohibidas de  la Agencia Mundial Antidopaje no es exhaustiva. Los fabricantes siempre encontrarán nuevas sustancias y mejores formas de encubrirlas. En este punto La AMA siempre llegará tarde. Sobre este tema, las organizaciones encargadas de los controles antidopaje son conscientes de que su sistema de control no es 100 % infalible. El ejemplo del incidente ocurrido con los deportistas rusos en 2015 solo confirma las sospechas. Por lo tanto, los atletas rusos pudieron pasar por alto el sistema desde 2011 hasta agosto de 2015 intercambiando muestras positivas antes de la prueba.

Muchos productos de dopaje aún pasan desapercibidos. Los resultados de las encuestas realizadas durante los juegos de 2011 así lo demuestran. Los porcentajes de los resultados sin duda habrían sido más altos si todos los atletas hubieran participado en la encuesta.

Los atletas siempre buscan superar y empujar sus límites, quieren ir cada vez más lejos.  Y hoy en día, los atletas más fuertes no son necesariamente los que siguen las reglas, sino los que están mejor informados.